Artículos, Promecal

Sabina-Valdeón

Artículo publicado en El bloc del gacetillero, en todas las cabeceras del grupo Promecal, el 9 de abril de 2017

Entre los tres mejores y más descarados columnistas de la prensa española está Julio Valdeón Blanco, un tipo auténtico cuya prosa ha sifo calificada, no sin motivo, de «caníbal». Pocos lo han calado tan bien como Javier Rioyo: «una excelente compañía si no te importa meterte en algún jardín». Tal vez por eso, por lo que tiene de «canalla», como ya demostró en Los fuegos rojos, Palomas eléctricas o El fulgor y los cuerpos, entre otras novelas suyas, se atreve ahora con Sabina. Sol y sombra, tras el éxito en los Estados Unidos y Europa de American madness: Bruce Springsteen y la creación de Darkness on the edge of town. Sabina. Sol y sombra habla del año del diluvio, de dulces hoteles, del arte de mentir y mucho más. Pocas veces se escribe un libro como este. Trabajado hasta la extenuación: recoge el testimonio de decenas de amigos, músicos y otros cantantes que cuentan lo contable y lo incontable sobre Sabina. Elegante, fiel en las fuentes, de palpitante contenido, esta es la gran biografía sobre Joaquín Sabina, ese trovador del siglo XXI que ha roto los límites de la canción y renovado el rock español. A mitad de camino entre la biografía, el periodismo literario y el ensayo, Sol y sombra marca un antes y un después en la ya abultada bibliografía dedicada a uno de los más geniales compositores e intérpretes del último siglo. Valdeón es consciente de que se enfrenta a un auténtico mito. Precisamente por eso, y para no caer en la hagiografía, habla con todos y cuenta lo que gusta y lo que no gusta, desde el pálpito de las cosas sencillas y el paisaje corriente de la vida. Como esa confesión: «soy bastante cobardón», arrancada al cantante en un mano a mano —tequila de por medio— en casa de Sabina. A Sabina y Valdeón les une su habilidad para combinar la cultura con mayúscula con el lenguaje de la calle: «cuando me hablan del lenguaje de la calle, tengo el prurito de decir: “Oye, el lenguaje de la calle, pero elaborado artísticamente”», le dice Joaquín a Julio en esas confidencias tan sabrosas con las que cierra Sol y sombra. «¡Las canciones son canciones, no son temas!», repite Sabina. Acierta el número uno, Raúl del Pozo, al decir de este vallisoletano trasplantado a Nueva York que Sabina. Sol y sombra es el «fresco de una España colgada entre la ceja y el martillo». Para Valdeón se trata, en realidad, de «una carta de amor. Una concentración de veneno y versos para explicar la historia de España a través de 19 días y 500 noches». Julio Valdeón es un periodista que ama su oficio con pasión extrema. Un escritor que se distingue por su hondura humana y por el aliento poético de su prosa. Un tipo, como Sabina, apasionado por la vida y sus peligros, ciertamente.

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